Euforia y desazón es un proyecto que se basa en el intercambio entre la compañía catalana El Eje y el dramaturgo y director argentino Sergio Boris. A lo largo de siete meses y medio, la compañía y el director han estado creando el espectáculo desde una profunda colaboración catalanoargentina y la oportunidad de repensarse desde el choque entre unos y otros. Durante el proceso, han buscado que la mezcla de metodologías, miradas y perspectivas teatrales provoquen un salto adelante en los códigos teatrales autónomos, para encontrar la actualización de sus respectivos proyectos. La obra explora la idea de fracaso como un valor, como un sitio a afirmar, centrado en la figura del alumno repetidor y su otra cara inevitable: el lugar desde donde se examina, que sufre, también hasta el fracaso, el mandato del saber. El examen lleva unido sus tópicos, sus relatos y su forma representativa. Así será la obra, el desarrollo de trastornar las relaciones de poder, donde el examinado parece, por momentos, saber más que el examinador. O que, finalmente, nadie sabe demasiado.